Ante la novedosa estrategia de negocios de BMW y Daimler, al integrar sus capacidades de uso compartido de automóviles de DriveNow y Car2Go, los organismos que regulan las leyes antimonopolio de la Unión Europea han dado su aprobación. Esto bajo el cumplimiento de ciertas condiciones y las correspondientes normativas.
Ahora los mayores fabricantes mundiales de vehículos de lujo se han unido y pueden competir con sus grandes rivales como proveedores de servicios de transporte privado, Uber Technologies, el gigante estadunidense y la compañía china Didi Chuxing. Y es que entre Car2Go y DriveNow, cuentan aproximadamente con 20,000 vehículos distribuidos en 31 importantes ciudades, atendiendo a más de cuatro millones de usuarios, que utilizan actualmente sus servicios de movilidad.
Una alianza más para fortalecer la movilidad como servicio
Por medio de las diferentes alianzas establecidas por estas empresas alemanas, cuentan también con los servicios de una red de transporte bien extendida y consolidada, pues Mytaxi, Chauffeur Privé, Clever Taxi en Europa y Beat en Sudamérica, tienen aproximadamente 16 millones de usuarios y cerca de 170,000 conductores.
Por otro lado, la fusión permite a Daimler y BMW, los dos gigantes alemanes, dividir el riesgo de operar en un mercado centrado en la tecnología, muy atractivo para un creciente grupo de rivales en servicios de movilidad. Estas conservadoras y tradicionalistas empresas están ingresando a un entorno muy dinámico y pretenden hacerlo blindadas al máximo.
No solo el riesgo se verá reducido, también se espera una disminución en los costos de operación y por otra parte, una apertura hacia la innovación y el crecimiento de la participación en el mercado para brindar una movilidad compartida, conectada de forma inteligente.
Eso sí, no todo es tan fácil. Debido a algunas restricciones locales, BMW y Daimler están obligados a compartir su aplicación de movilidad con otros proveedores de servicios e, igualmente, sus servicios deben estar disponibles desde otras aplicaciones de movilidad.
Si estas condiciones implican una ventaja o por el contrario, se constituyen en una verdadera debilidad, solo el tiempo lo dirá, pero igualmente las grandes empresas alemanas deben apegarse a estas regulaciones. Esto con miras a evitar un posible monopolio logrado a través de su fusión.
Finalmente, los fabricantes anunciaron que su empresa conjunta planificada tendrá su sede en Berlín.