Los coches eléctricos tienen grandes ventajas como la reducción de ruidos, menor mantenimiento y las bajas emisiones que tienen. Sin embargo, uno de los puntos negativos por los que las personas evitan comprar vehículos eléctricos es por el tiempo de carga que estos necesitan. El tiempo generalmente depende del tipo de corriente y potencia del punto de carga, pero siempre tienes que apartar algunas horas para ello. Como respuesta a este problema, la marca china NIO acaba de instalar su primera estación de intercambio rápido de baterías en Europa.
La primera estación de cambio de baterías de NIO se realizó en noruega, un país que se reconoce internacionalmente por el mercado eléctrico existente. La instalación fue anunciada por el Director de Comunicación NIO en Europa, Florian Otto. La estación aún no parece estar operativa aunque ya esta totalmente instalada en la calle y tienen un coche NIO ES8 en el frente como reclamo publicitario.
El proceso de cambio de batería en esta estación es en teoría cómo cambiar las pilas del mando de la televisión. El conductor introduce el coche en la estación de cambio, que mediante unos raíles el coche queda perfectamente alineado para su posterior elevación. Una vez dentro, se sube el coche sobre gatos hidráulicos, el sistema desatornilla la pila descargada, la retira, introduce una nueva completamente cargada y la fija al coche. Un proceso de apenas tres minutos que podría revolucionar el mercado y el sistema de carga.
Todo el proceso se ha diseñado para llevarse a cabo de forma automática, sin la presencia de un ser humano. Anexo al carril de paso de los coches se encuentra un pequeño almacén para las baterías gastadas, que son conectadas a la red para volver a recuperar la energía a la espera del siguiente cliente. Toda una obra de la tecnología que cuenta con al menos 500 patentes para su instalación y desarrollo.